El plasma rico en plaquetas (PRP) es una palabra de moda en las industrias de la belleza y la estética en estos días. ¿Uno de los usos más discretos del PRP? Inyectándolo en el pene para mejorar su función.
El P-Booster® es una inyección de plasma rico en plaquetas (PRP) en el pene. “P-Booster® funciona para estimular, dar vitalidad al miembro sexual masculino y hacer que los hombres tengan erecciones más duras”, dice Dr. Daniel Campos, DNP, Especialista en antienvejecimiento certificado por la Academia Americana de Nurse Practitioners. “El PRP se usa para rejuvenecer, con fines curativos, para estimular los factores de crecimiento que ayudan en el proceso de reparación, para la producción de colágeno. Eso es lo que se quiere lograr en el pene con el P-Booster® para que el tejido eréctil sea más saludable, por eso lo nutrimos con las propiedades del PRP".
Al igual que un tratamiento PRP utilizado para otros tratamientos estéticos y terapéuticos, el procedimiento implica tomar una muestra de sangre del cuerpo (generalmente el brazo o algún otro lugar no invasivo) y colocarla en una centrífuga para aislar el plasma rico en plaquetas. Si bien la solución de PRP se puede aplicar tópicamente, este tratamiento requiere que se inyecte en el cuerpo del pene.
Cuando llega el momento de las inyecciones, el Dr. Campos dice que el área se adormece durante unos 15 minutos con un anestésico tópico. Luego, el PRP se inyecta en múltiples áreas del pene, incluida la glande y partes específicas del eje. "Hay un dolor mínimo", dice. "Casi no lo sienten en absoluto". Dado que los pacientes ya están en el consultorio, el Dr. Campos a menudo recomendará combinar P-Booster® con PRP para la caída del cabello. Si un paciente va a recibir un tratamiento con láser, usará cualquier solución sobrante en el área afectada. "Haré su P-Booster® al mismo tiempo que haré un láser, y aplicaré algo de PRP tópicamente para ayudarlo a sanar", señala.
Los efectos secundarios de P-Booster® incluyen hematomas e hinchazón en los lugares de inyección, que deberían desaparecer en unos días. El Dr. Campos recomienda que los pacientes esperen 24 horas antes de tener relaciones sexuales o masturbarse debido a la hinchazón.
En un momento, las inyecciones de PRP se realizaron como un procedimiento en solitario. Los pacientes comenzaron con tres tratamientos en un lapso de tres meses, antes de regresar cada dos o tres meses para mantenimiento. Hoy en día, P-Booster® rara vez se hace solo. “Ahora usamos terapia de aspiración al vacío para ayudar a estimular más”, dice el Dr. Campos. "Hace que la circulación del área aumente, mientras que el PRP las alimenta con nutrientes".
La combinación de P-Booster® y la terapia de ondas de terapia de aspiración al vacío es un dúo popular. Los dispositivos de terapia de aspiración al vacío utilizan un mecanismo de succión para causar microtraumatismos en el pene que aumentan el flujo sanguíneo y la viabilidad del tejido en el área. "Es principalmente para personas que aspiran a aumentar el calibre del miembro eréctil", dice el Dr. Campos. La terapia de aspiración al vacío generalmente implica de 10 minutos inmediatamente después de la inyección y 10 minutos diario en casa por un periodo de tiempo mientras dura el tratamiento, seguido de 10 minutos una o dos veces al mes de mantenimiento.
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